Puentes hacia un consumo comunitario
Vecinas que se organizan para comprar alimentos a los productores. Instituciones que vinculan agricultores familiares y pequeñas cooperativas con consumidores de todo el país. Experiencias similares se multiplican en nuestro país.
El INTA reunió a tres de ellas en un conversatorio virtual, para conocer su trabajo y promover alternativas que favorezcan la comercialización de alimentos saludables y a precios justos.
“Alimenta”, Comunidad de Consumo
“La idea surgió en 2017, cuando un grupo de mujeres de la localidad de Viedma nos organizamos para comprar alimentos a los productores”, explicó Mariana Arregui, integrante del “Colectivo agroecológico de Río Negro”.
“Para muchas, era la primera vez que pisábamos una chacra para conocer a las personas que producían nuestros alimentos. El INTA, a través de su acompañamiento a los productores, nos ayudó a entender la “transición agroecológica”. Así nos fuimos dando cuenta de la importancia de nuestra responsabilidad como consumidoras. Que a través de las compras comunitarias podíamos influir en las formas de producción, más saludables y a precios justos.”
La experiencia que comenzó con dos productores y 10 familias consumidoras hoy cuenta con 18 chacras vinculadas a más de 100 familias.
Acerca del proceso de organización Arregui explicó: “Fuimos aprendiendo paso a paso, generando vínculos de confianza con los productores y fortaleciendo de a poco el proceso de comercialización.
Se crearon 10 “nodos”, para coordinar los pedidos. En pandemia se organizaron los bolsones saludables, llegando a coordinar unos 1200 en forma semanal.
Luego se organizó la feria agroecológica, todos los jueves en la ciudad.
Fuimos conectándonos con productores de otras provincias, como la granja “Naturaleza Viva”, de Santa Fe.
A su vez fuimos respondiendo a pedidos de otras zonas, haciendo envíos a través del tren y generando la formación de otras redes”.
La exposición, acompañada con imágenes y anécdotas, reflejó la construcción paciente de nuevas relaciones entre productoras y consumidoras, más saludables, más justas y solidarias.
Enrique Martínez, ex titular del INTI y coordinador del Instituto de la Producción Popular fue el encargado de explicar esta iniciativa que vincula a productores de la economía social de diferentes provincias con consumidores de todo el país.
“Nuestro desafío es insertarnos en la compleja cadena de valor de la producción y comercialización de alimentos tratando de favorecer al productor y al consumidor”, explicó Martínez.
Esta comercializadora alternativa se presenta como una gran tienda “on line”, o virtual que puede visitarse ingresando a https://todoscomen.produccionpopular.org.ar/ .
Allí se ofrece arroz, aceite, yerba, pastas, productos pertenecientes a unos 50 proveedores de la agricultura familiar, cooperativas, pequeñas empresas de 12 provincias, desde Formosa a Chubut.
Una vez adquiridos, los alimentos se entregan en cualquier punto del país, con costos de transporte absorbidos en parte por la comercializadora.
Resumiendo el espíritu de la iniciativa Martínez explicó: “A pesar de que compramos y vendemos, nuestra meta no es hacer una diferencia, como un intermediario común, sino organizar el consumo, beneficiando a su vez a los productores. Por eso, estimulamos la creación de grupos de consumidores para que pidan en conjunto, para ahorrar gastos de envío y ganar en calidad y precio”.
Proveeduría y comedores populares en Rosario
Juan Gómez, secretario de AMECRO, la mutual del Sindicato de Empleados de Comercio de Rosario, contó la experiencia de tres Proveedurías, impulsadas por dicha mutual, que abastecen con productos naturales a miles afiliados.
“A través de convenios de reciprocidad vamos articulando con unas 80 organizaciones sociales. Nuestros proveedores son productores familiares y cooperativas como pequeños tambos, fábricas recuperadas de pastas y dulces, incorporamos miel orgánica del pueblo Wichí del Chaco.”, comentó Gómez.
Además de las Proveedurías, la Mutual implementa el servicio de “Comedores mercantiles”:
“Hoy estamos ofreciendo un servicio mensual de comidas para 40 mil asociados, con una bandeja caliente con un costo que no supera los 300 pesos. Demostramos que sin especulación es posible abaratar los costos y mejorar la calidad de los alimentos”
Desafíos
Luego de la presentación de las tres experiencias, los organizadores abrieron la conversación a los más de 100 participantes de todo el país conectados vía zoom.
Además de destacar la iniciativa del encuentro, plantearon desafíos relacionados al “involucramiento del estado en las experiencias”, “definición de precios de productos agroecológicos frente a la competencia de grandes empresas”, “la participación de nutricionistas y cheff en la difusión de la alimentación saludable”, entre otros temas.
Los contenidos de este conversatorio, junto a otros similares pueden verse en https://www.youtube.com/channel/UCuSo3e9Pm8DkOft3xgZKdbA
Fotos de tapa y de la nota: Facebook Colectivo Agroecológico del Río Negro
Junto a los campesinos y pueblos indígenas
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